Todos los órganos móviles deben estar soportados al menos en dos puntos de apoyo que permitan el giro de los ejes oponiendo la mínima oposición posible, a estos elementos se les llama rodamientos.  Dependiendo de la forma de apoyo se diferencian dos tipos:

1. Cojinetes de deslizamiento o de fricción, ya que las superficies fija y móvil «friccionan», por deslizamiento, separadas de una película de lubricante.

Están constituidos por un soporte perfectamente acoplado sobre un casquillo de metal duro, que es el cojinete propiamente dicho, dado que siempre se produce rozamiento es necesario recurrir al uso de los cojinetes deben cumplir las siguientes condiciones:

Una superficie exterior suficientemente lisa para que el lubricante sea arrastrado por el árbol al girar.
Un elevado coeficiente de transmisión de calor, para disparar el incremento de temperatura producido por el rozamiento.
Un coeficiente de rozamiento lo menor posible en el deslizamiento en seco con el fin de reducir la resistencia en el momento de arranque.
Una buena unión entre el casquillo y su soporte.
Este tipo de cojinete queda limitado por la carga admisible a soportar para poder formar la película lubricante, pero cuando este inconveniente no se presenta, se pueden emplear en órganos giratorios a grandes velocidades y con poco ruido.

 

2. Cojinetes de rodadura o rodamientos, en ellos el gorrón del árbol y la superficie de rodadura del soporte están separados por elementos rodantes, de forma que con el giro del gorrón o del cojinete se genera un movimiento de rodadura y no de deslizamiento, como el caso anterior.Están constituidos por dos anillos rodantes separados entre sí por unos cuerpos, también rodantes, interpuestos entre éstos, cuya forma varía según su uso, pueden ser de diferentes formas: bolas, rodillos, cilíndricos, agujas, etc.